Tiempo de preparación: 50 minutos
¡Buenos días chicos! Ya era hora de volver a publicar alguna que otra cosilla dulce. Últimamente las recetas de cupcakes están inundando la red y la verdad es que están buenísimos (o por lo menos, yo no soy capaz de resistirme). Así que decidí probar yo también, readaptando la receta de magdalenas de toda la vida (la que me enseñó mi padre hace años y que es original de Eva Arguiñano) y no puedo estar más contenta con el resultado. La mermelada le aporta una suavidad y jugosidad indescriptible al bizcocho y el amargor del chocolate negro contrasta a la perfección con el resto. Para aquellos a los que el chocolate negro no les acabe de convencer, siempre pueden optar por el chocolate con leche o blanco. Os contaré un secreto: yo he probado las tres versiones y todas me han encantado. Bueno pues aquí va la receta:
Ingredientes: (Para unas 24 magdalenas)
-4 huevos medianos
-200 gramos de azúcar
-200 gramos de harina
-100 gramos de aceite de girasol (tiene un sabor más suave que el aceite de oliva)
-1 sobre de levadura en polvo
-Mermelada de frutos rojos o de fresa
-Chocolate nestlé postres (podéis elegir entre chocolate negro o chocolate blanco)
Comienza batiendo en un bol los 4 huevos junto con los 200 gramos de azúcar. Añade poco a poco el aceite de girasol sin dejar de batir.
Incorpora paulatinamente la harina previamente tamizada junto con la levadura, para evitar que se formen grumos. Remueve con unas varillas haciendo movimientos envolventes y siempre en la misma dirección.
Precalienta el horno a 180 º.
Con ayuda de un cuchillo de sierra trocea el chocolate en pepitas. Añade la mitad de ellas a la masa y remueve con cuidado de no deshacerlas. Pasa la mezcla a una manga pastelera y rellena los moldes de papel (aproximadamente hasta 2/3 de su capacidad).
Pon una cucharada de mermelada en el centro de cada magdalena y decórala con algunas pepitas de chocolate y una pizca de azúcar. Esto hará que queden más crujientes al hornearlas. Hornea en modo pastel a 180 º durante 17 minutos.
Consejo: Si la mermelada se te cae al fondo de las magdalenas, la próxima vez puedes prepararlas con ayuda de un descorazonador de manzanas. De este modo, lo que tienes que hacer es añadir a la masa únicamente las pepitas de chocolate. Una vez horneadas déjalas enfriar. Con ayuda del descorazonador vacía el centro de la magdalena y rellénalo con la mermelada. Luego vuelve a tapar con el trozo que hemos extraído previamente.
Et voilà!
Y vosotros, ¿habéis sucumbido a los cupcakes?